Con todo el sector pesquero atento a la tan esperada noticia sobre la segunda temporada de pesca de anchoveta en la zona Norte-Centro del Perú, el reciente crucero acústico del IMARPE detectó una biomasa relativamente baja de 5.4 millones de toneladas. A pesar de ello, las autoridades emitieron una resolución que autoriza el inicio de la nueva temporada el 7 de noviembre, con una cuota provisional de 500,000 toneladas.
Actualmente, se espera el resultado de una evaluación complementaria conocida en Perú como “Operación Eureka”, un procedimiento utilizado periódicamente para validar y actualizar las estimaciones de biomasa. Esta operación se llevará a cabo entre el 4 y el 6 de noviembre, con la participación de 18 embarcaciones que explorarán hasta 80 millas de la costa peruana, con el objetivo de confirmar la presencia, composición (juveniles, adultos, reclutas, etc.) y distribución geográfica de los cardúmenes.
Este proceso no es nuevo para la industria peruana ni para el dinámico ecosistema de la Corriente de Humboldt. De hecho, el IMARPE ha realizado 66 operaciones Eureka en su historia. Según estudios previos de este año, se espera que la biomasa real sea mayor, y el propósito actual es localizarla. Una vez que se disponga de las cifras actualizadas, las autoridades podrían considerar aumentar la cuota.
Aunque las opiniones son diversas, muchos actores del sector creen que la cuota total podría finalmente elevarse a alrededor de 1.5 millones de toneladas (o más). Otro punto en discusión es que, si bien la presencia de anchoveta en la zona Norte-Centro fue menor a la esperada, se ha detectado una biomasa inusualmente grande en el sur, lo que sugiere que parte del stock podría haber migrado hacia el sur y regresar conforme mejoren las condiciones oceánicas.
Durante la próxima semana, dos factores serán clave para definir el panorama de esta nueva temporada: los resultados de la Operación Eureka y el desempeño inicial de la pesca, que oficialmente comienza este viernes.